Ubicado a los pies del Macizo de Gorbeia, declarado Parque Natural por el Gobierno Vasco en julio de 1994, el más extenso de la CAV, y con el Biotopo protegido de Itxina a sus espaldas, el cual pertenece íntegramente a esta localidad, el valle de Orozko se rodea de un entorno natural inigualable y privilegiado.
A unos 20 minutos de Bilbao podemos encontrar esta localidad vizcaína y disfrutar de un paisaje de postal con sus casitas “colgadas” y coloridas junto al río Altube y sus verdes y frondosos bosques y montañas salpicados de caseríos de fondo.
Adentrándonos en el pueblo, no hay nada mejor que visitar el Museo Etnográfico de Orozko, situado a pocos metros del Ayuntamiento, para saber más acerca de la vida tradicional de las personas que una vez habitaron en uno de los valles más espectaculares de Bizkaia. Un museo que se conserva tras un edificio señorial del siglo XVIII, más conocido como Casa Kareaga.
Orozko es, además, un pueblo con un gran patrimonio cultural e histórico, destacando la Torre Aranguren construida en el siglo XVI, la iglesia de San Bartolomé de Olarte o la de San Pedro de Murueta, además de un gran patrimonio natural, con “kirikiños” utilizados para guardar las castañas durante el invierno, las neveras que servían para conservar la nieve o las “txabolas”, utilizadas por los pastores durante su estancia en las tierras altas.